La primera referencia escrita a este lugar data exactamente de 1550 y aparece en una carta de compraventa, con el nombre de Huerta de las Infantas, situada bajo el adarve de la puerta vieja de esta villa.
La primera referencia escrita a este lugar data exactamente de 1550 y aparece en una carta de compraventa, con el nombre de Huerta de las Infantas, situada bajo el adarve de la puerta vieja de esta villa.